viernes, 10 de noviembre de 2017

Después de la cirugía






                     Yo creo que la mejor forma de empezar este blog es con un "Gracias a Dios sobreviví otra vez". Quinta cirugía desde el 2016. Pensé que iba a ser fácil y que no dolería tanto, o al menos que estaba acostumbrada a eso. Los días han sido difíciles para mi, para mami y para todos.


                    Sigo extrañando a mi mitad, nunca pensé que la persona con la que peleara por el asiento de al frente o por quién llegaba primero me iba  a hacer tanta falta. Todavía tengo grabado en mi mente el recuerdo de la última vez que lo vi, y lo atesoro, no quiero que se vaya hasta que vuelva a verlo. Bryan es muy importante para mí, estoy tan orgullosa de él, yo sé que el también nos extraña. Aunque hablemos todos los días no lo puedo tener para jugar juegos de mesa, hacer apuestas de qué pasará primero.


              Ya me dieron de alta, estamos en el hospedaje donde mami me cocina. Se supone que mi dieta sea completamente líquida, pero mis maxilofaciales bellos y hermosos que Dios me puso, me dejan comer papas majadas de chilis, mofongo que esté bien blandito y broccoli. Sí, así mismo me lo dieron en un papel escrito. No crean que fue que yo insisití, no, eso jamás.


               Estuve una semana nada más en el hospital e hice muchas amistades. Una de las enfermeras, que era gringa (Abby if you read this don't be mad, I still love u), SABÍA QUIÉN ERA DADDY YANKKEE Y ZION Y LENNOX. Ella hasta ha ido a sus conciertos. Demás está decir que es una de mis favortitas.





                La atención y el trato en el hospital fueron excelentes. De la cirugía les tengo que contar que todo fue mejor de lo esperado. Se suponía que me hicieran una traqueotomía y una gastro. Nada de eso pasó, se suponía que quitaran tejido del muslo y tampoco pasó. Duró ocho horas exactas, gracias a Dios.


              No sé cuando regrese a Puerto Rico, pero estoy loca de volver. Aun no puedo porque no quiero terminar con una infección en la herida o algo así. Hasta el momento pasaremos Thanksgiving acá. Me deprime, tengo que decirlo, porque no escucharé a abuela desesperada de que la comida avance a estar, ni a titi Elba bajar caldero tras caldero, luego pelear entre ellas por quien es dueña de cada cucharón.


               No está siendo nada fácil, dormir en las noches es casi imposible porque la cicatriz esta vez es desde la cabeza y duele acostarme. no encuentro una posición cómoda, pero ni modos. tenemos que aguantar el empuje.







PD1: Mami no queria hablar inglés con nadie y todo lo tenía que hacer yo, no saben a los maltratos que fui sometida.




PD2: Donde estoy, PUEDO RECIBIR PAQUETESSSSSSSSSSSSS


PD3: Extraño a Bryan demasiado, y necesito verlo en Thanksgiving, no sé que haré.


PD4: Quiero ya volver a la normalidad, a la zona de no dolor, pero se va a tardar un buen tiempo.


PD5: La primera de la foto de la izquierda de arriba es Q, una de mis alcahuetas, abajo está Shellley que no sabía lo que era Despacio y tuve que enseñarle, Al otro lado está Evan, uno de los fellows de Maxilofacial que por más que intentó nunca fue mi favorito aunque me cae muy bien, abajo está Linda, una enfermera de las mas cariñosas.



miércoles, 1 de noviembre de 2017

Antes de la cirugía






                  








Algunas veces te toca elegir tus batallas, otras veces, te das cuenta de que ya estas en medio de ellas, y tienes dos opciones, pelear o dejarte vencer. 



Quienes me conocen personalmente y los que me han conocido a través del blog, saben que yo no me dejo de nadie, y no me quedo con nada que no es mío. 



Babi no era mio, aunque al final me quedé con él como trofeo. María no es mía y mañana nos encargaremos de sacarla, hasta el momento tendremos fotos, quizá me lo quede como trofeo, pelearé eso. 



Pelearé eso, y pelearé por mi vida. A veces pienso que no es justo tener que pasar por esto otra vez, y admito que me da un poco de miedo y coraje, pero eso mismo es lo que me llena para seguir esta  batalla. 



Hoy fue mi última cita con el doctor, y el CT de la semana pasada se ve mejor de lo que esperaban, creo que se debe a que estoy comiendo brócoli y cero azúcar, y cuando digo cero me refiero a que ni jugo tomo, todo es agua, estoy cambiando poco a poco mi dieta, y me está gustando comer saludable. Creo, bueno no creo, estoy segura que comeré saludable hasta el resto de mi vida. Mi salud no es un juego, y no estoy como para un tercer round. Madrina ha influido mucho en esto, y aunque después de la primera pelea contra el cáncer lo estaba intentando, no salía de Wendy’s. Ahora me siento un poco culpable, luego recuerdo el sabor de las loaded y se me pasa.




No han sido dias fáciles, en el sentido de que extraño a Víctor y a Bryan (quien me usará de excusa para no ir mañana a la escuela). A abuela ni se diga, aqui estaria feliz de toda la ropa que uso y que dejé los crop tops y los shorts. Se que abuelo Cele tiene el alma hecha pedazos porque hablé con él y lo escuché llorar, y eso es algo nuevo para él. Abuelo Dino sigue con el desespero de conseguir un pasaje para venir. Sé que esto es algo que no solo me afecta a mi, sino a todos a mi alrededor, es por eso que duele aun más, porque sé que mañana ellos estarán todo el día preocupados por mí, y eso me hace sentir culpable. Por más que intente distraerme, ese pensamiento seguirá ahí.




PD: FUI A ULTA Y GASTÉ MÁS DE LO QUE DEBIA Y NO ME ARREPIENTO.



PD2: He socializado con la familia que tengo aquí en Jacksonville y aunque somos un poco lejanos tenemos mucho en común,



PD3: Sigan orando por mí.


PD4: ME VEO BELLA EN ESA FOTO.


PD5: Estos tres revoltosos son mi fondo de pantalla para que recuerde que tengo que volver a Puerto Rico a ponerlos en cintura aka añorarlos con todo lo que les he comprado.










PD6: HAPPY BIRTHDAY TITI JENNIE, espero que cumplas mil más y que Noah te deje tomar muchos naps esta semana






~Los amo