viernes, 23 de marzo de 2018

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Im sorry, se que llevo muchísimo tiempo sin escribir, pero debo admitirles que no han sido mis mejores días. Casi nadie sabe que hace una semana tuve una operación más, para intentar cerrar la herida, un skin grafft. Se supone que en una semana y media sabremos si funcionó o no. La tensión me está matando, pero seguimos confiando en papito Dios.

         Les confieso que el miércoles pasado me quitaron los puntos. Gente, yo voy a mis citas con un espejo, un pote de hidrogel y una hoja de sábila en mi cartera, ah y el tea tree oil no puede faltar. Entonces llego, me pasan y me preguntan qué doctor quiero que me atiendan (Im the princess there) y pedí a Evan porque el siempre limpia mis lágrimas y a Matthew porque le debo una estrangulá, y si me iban a quitar los puntos necesitaba apretar a alguien y él usualmente se deja. Lamentable, Matthew no estaba, pero Evan si. Ay Dios mio ya estoy escribiendo demasiado, but I dont care. La cuestión es que mandaron al chief residente y a Evan. El chief me quitó los puntos mientras Evan me agarraba y me secaba las lágrimas.

         Cuando vi la herida sentí la decepción más profunda de mi vida, se veía mejor, pero no el mejor que yo quería. Procedí a arroparme en la camilla y llorar echa un burrito. Exploté, ya no podía más, me sentí caer. Estuve unos días media apagada y decepcionada. El doctor me vio, me dio un apretoncito y me dijo que tuviera paciencia, que eso estaba sanando. Quizás no lo veo y no lo entiendo, pero sus propósitos tendrá Dios.

          Nadie que me diga que lo entiende le creeré, pues nadie ha estado en donde estoy ahora mismo. Sepan algo, Dios nunca nos deja solos, y digo esto con lágrimas en mis ojos. Ayer, Vivian me llamó que si quería darme el trip a Orlando y la realidad es que no me sentía tan bien, y ya yo había ido al sitio, mami dijo que no iba y yo dije “¿A que hora nos vamos?”


El viaje fue super fun. Me desconecté de todo y olvidé que tengo una herida en la cara. Vi a Hildalis y chismeamos como en los viejos tiempos. Tengo que decirles que fue terapéutico, nos reimos muchísimo y comí como que tengo que aumentar de peso. Me hacía falta un día así, mil gracias Vivian.




PD1: Lo sé, tengo demasiada confianza pero es que ellos son como mi familia, los veo casi todos los días.

PD2: Don’t worry, Im ready to party and shine.

PD3: Estoy super agradecida por el detalle que tuvo la Fundación Rayito de Esperanza, de verdad que esos gestos valen mil.

PD4: Casi nadie sabía de la cirugía, pero Fabiola si, y juntas hicimos una presentación de power point con todas las dudas para el doctor, repartimos bookmarks y todo. Nevermind.

PD5: Extrañaba escribir, pero estoy haciendo algo bien chévere que les va a gustar más, ténganme paciencia


PD6: Los amo

PD7: Les dejo más fotos que antes porque quiero que aprecien mi felicidad.

PD8: Ya son diez cirugías.

PD9: Mami me hizo una loncherita con meriendas BLW, me echó una sabatina y una almohada, y me dio $1 pa'l helado.

PD10: Acabo de llegar a la casa y me llegó un regalito de papi, estoy majjjj feliz aun.














sábado, 3 de marzo de 2018

Poniéndonos al día

Tengo mucho que contarles...

     Empezaré porque fui de vacaciones a Puerto Rico y no tuve oportunidad ni de respirar. En casa de abuela nadie puede dormir hasta más de las 8 de la mañana. Si no te levanta el gallo, la gallina, o abuelo diciendo "Hagan silencio que la nena (ósea yo) está durmiendo", pero a un tono de voz súper sutíl. En las noches tuve miedo porque estaba durmiendo con Bryan y sale y me dice "Ten cuidado porque a veces yo tiro puños dormido". En fin, fui a la bolera, fui a ver a la familia de Víctor, al shopping, vi a mi cucurru e hicimos un mini desmadre en la fila de Sephora cuando se le ocurrió decir que estaba sangrando por un ojo en vez de llorando. Pasé el tiempo con mi familia, la luz llegó en casa el día antes de irme y mil cosas bonitas más.

     El martes cuando nos íbamos, voy a pasar por TSA aquí en Puerto Rico, y como siempre me pararon. A veces me paran porque tengo tornillos y se ven en el scanner, otras veces por diversión jurau. La muchacha me dice "¿Te puedes quitar el bendaje?". Yo la miré con esta única cara de "Tu estas loca mana" y le dije que no, entonces me pregunta si puede tocarme la cara. Sabrán que también le dije que no, porque aunque aun no tengo sensación completa en esa área, no iba a dejar que nadie me tocara. Entonces me pasa un pañito por las manos y me mira mal. Como si fuese culpa mía tener la cabeza bendada! Después que me deja ir, pararon mi bulto también. Ya eso me lo imaginaba por que llevaba sábila congelada. Abrió mi bulto, me hizo un reguero de madre que no acomodó y estuve todo el vuelo intentando que volviera a su sitio y sacó la sábila. No me costó más remedio que echarme a reír porque era el karma por haberme burlado de los pasteles de mami. Se llevó mi sábila, llamaron hasta a agricultura, a medio mundo para ver qué era aquello. Lo pasaron por el scanner siete veces que le dije a mami que eso no iba a servir ya porque iba a tener demasiada radiación. Al final, logré pasar mi sábila y le regalé mi sonrisa más hipócrita a la tipa que parecía estar molesta porque no pudo llevare presa. Mi vida es un chiste, se los juro.


    Les contaré un milagro; el sábado por la mañana, abuela finalmente vio mi herida en vivo y a todo color. Después de debatir que los doctores deberían hacerme un injerto de piel, o pegarme la oreja (y que me quedara sin oreja) y no sé cuantas ideas más, llegamos al mutuo acuerdo de que debería ponerme sábila. Mi herida el sábado pasado medía 4 pulgadas de largo por 3 pulgadas de ancho. Me puse la sábila, porque ya a 120 días con la herida abierta y después de cinco operaciones fallidas, no había mucho que perder. Al día siguiente, la gasa que usualmente tengo ahí, estaba llena de supuración, PERO LA HERIDA LIMPIA. Cuento corto largo, hoy sábado, una semana después, la herida mide 3 pulgadas por 2 pulgadas. OSEA EN UNA SEMANA REDUJO UNA PULGADA. Les juro que quiero llorar de la felicidad. No puedo creer que después de tanto que he pasado, con algo tan "simple" como la sábila, la herida esté cerrando. 

       Fui a mi cita el miércoles, y me vio una doctora nueva que me dijo que no podía ponerme eso (la sábila), que siguiera usando el bendaje que ellos me ponían. Ustedes saben que yo iba bien puesta pal problema, cuando ella se va, el doctor me dice "Dame la cosa esa, ¿Mamá, como es que se lo pones? Esto es realmente bueno, está bien bonito y todo". 

      Por ahora no queda más que informarles

PD1: El viernes fui a comer pizza no-orgánica y dicen las malas lenguas que me comí cinco pedazos. Lo bajé con agua de limón para lavar mi conciencia.

PD2: Fui a plaza y una tipa se me quedó mirando asombrada, se tropezó y casi se cae. DON'T STARE PEOPLE.

PD3: En el último blog no pude subir las fotos porque había dejado mi laptop acá y la de Bryan no la entendía.

PD4: Bajé dos libras, aparente  y alegadamente porque nunca me estuve quieta en PR.

PD5: Abuela Lilly me alimentó hasta las 12 de la noche del martes, me hizo alcapurrias a esa hora, yo ni podía respirar gente de la jaLtera.

PD6: HAN VUELTO LAS POSTDATAS

PD7: Mami ha estado tranquiliza ultimamente.